Fin de fiesta

Hoy ha terminado la IX Feria Madrid es Ciencia. Desde el jueves, la Dra. Nebulosa, Cortocircuito y yo misma, ya sabéis, Omega, hemos sido insanamente envidiados por nuestros compañeros de Mad Science debido a nuestros irrisorios turnos de 1,5 horas. Los pobres chicos, repartidos por stands de diferentes empresas y con diversos grados de digna ridiculez, se desesperaban al ver como los enchufados de ABB llegaban los últimos y se iban los primeros. La verdad, razones para enfadarse por el San Benito que les ha caído no les han faltado, pero son buenos como panes y majos pa´repartir y se lo han tomado con mucho humor.

Nuestro taller iba enfocados hacia chavales a partir de 10 años, a los que les explicábamos conceptos básicos de energía y transformación de la misma. Cacharrearon con una placa solar pequeñita que hacía funcionar un timbre y un motorcito. Acto seguido, acompañados de los sorprendidos padres, podían comprobar lo perdidos que estaban al estimar el consumo eléctrico de los diferentes electrodomésticos de la casa. La traca final, la actividad más llamativa, era una demostración de cómo volar por los aires una pequeña nave espacial (tapa de papel de aluminio) con su astronauta correspondiente. No lo hagáis en casa, pero que sepáis que solo se necesita un matraz kitasatos, papel de aluminio, carbonato potásico y agua calentita.

En mitad de esta nada monótona rutina, Jorge y Antón fueron los únicos conocidos que me sorprendieron con su visita. Pudieron disfrutar del taller, llevarse más regalitos que nadie, avergonzarse por mis referencias continuas a ellos a través del micrófono y, sobretodo, hacerme pasar un rato estupendo.