viernes, 28 de septiembre de 2007

Daimiel IV: Gentes

Tengo que dedicar este pequeño trocito virtual a dar las gracias a todos los voluntarios que convivieron conmigo y mis manías esos 13 días, incluyendo a Jose Luis Hernández (el boss) y Jose Manuel Hernández, el coordi, de cuya presencia no pudimos disfrutar tanto como nos hubiera gustado. Cada uno de su padre y su madre y juntos, un grupo heterogeneo, divertido, interesado e interesante y, creo yo, muy llevadero.
Jose Luis Hernández, alias JL, El boss, Moni, etc... fue el encargado de monitorearnos a todos y para mi, ha sido y será una gran influencia. Es una persona extraordinaria, con un corazón asín de grande y mucho que ofrecer y que enseñar. Además lleva la sangre de monitor en las venas y con él hay que hacer verdaderos esfuerzos para aburrirse. Ornitólogo anillador experimentado, ecologista en acción, el dire del Grupo Ornitológico de Alcázar y tantas otras cosas que se me escaparán, me hizo prometer que volvería como voluntaria al proyecto de voluntariado en ríos... y ahora es deuda para mí, que cumpliré gustosamente.




Carlos, Luis, Manu, Salima y Cristina, junto conmigo, forman el grupo de voluntarios sensu stricto. Cada uno con sus peculiaridades y su forma de ser, muy diferente de los demás y muy interesante en todos ellos. Lo que recordaré con más cariño es la sorpresa que me dieron el día después de conocer que ya era licenciada: de tapas en la Duquesa, después de haber estado recogiendo bichos durante unas cuatro horas, fueron sacando con cuentagotas pequeñas bolsitas con regalos dentro, cada cual más sorprendente, terminando con una preciosa postal de felicidades en la que aparecía mi orgullosa foto del día anterior con una Ranita de San Antón en la brazo.
Desde aquí, chicos, quiero agradeceros lo bien que me lo hicisteis pasar durante esos días y deciros que, por mí, ¡REPETIMOS!

miércoles, 26 de septiembre de 2007

Daimiel III: Bichos

Como planeaba hace tiempo sin llegar a cumplir la promesa, esta vez sí que he estrenado mi Cuaderno de Campo del observador de aves, gracias al cual tengo un ordenado registro de la fauna más interesante vista en los parajes de la Mancha Húmeda. En las Tablas pudimos ver varios fumareles cariblancos Chlidonias hybridus, verdaderos acróbatas que se la juegan a pocos metros sobre la lámina de agua, entre pequeños grupillos de Pato Colorado Netta rufina y el pato más decorativo porque Tadorna tadorna (Tarro Blanco). En el agua, asomando temerosos su cabecilla puntiaguada, se observaban varios ejemplares de Galápago Europeo y Leproso. Los reyes más altos del cielo son allí el Aguilucho Lagunero Circus aeruginosus y el cenizo C. pygargus, monarca sólo estival. A mitad de voluntariado nos sorprendieron un par de Cigüeñas Negras Ciconia nigra volando muy bajito al lado mismo del centro de interpretación, que fueron objeto del enfoque de Luis durante no menos de diez minutos de sesión fotográfica.

Fuera de la zona de las pasarelas, donde el agua ya ni se intuye, encontramos, entre otros bichejos, un grupo emigrante de Abejeros Pernis apivorus, Ganga Ibérica Pterocles alchata (nueva para mí) y Alcaraván Común Burhinus oedicnemus.


Las sesiones de anillamiento no sirvieron solo para aprender técnicas y ver amaneceres, si no que también me permitieron tachar cinco especies, aunque me de vergüenza reconocerlo: Colirrojo Real (una hembra, es la pena) Phoenicurus phoenicurus, Papamoscas cerrojillo Ficedula hypoleuca, Papamoscas Gris Muscicapa striata, Zarcero Hippolais polyglotta (que no me atrevo a distingurlo en campo del Carricero) y Mosquitero Musical Phylloscopus trochilus (idem con su congénere collybita).


En Cabañeros disfrutamos de un espectáculo único: la berrea de los ciervos. Como en cada visita, nos "colamos" (va entrecomillado porque era con todas las de la ley, eh!) en la zona VIP, aquella restringida al público que no paga más de 60 euros para dejarse engañar buscando la cagarruta de la Imperial. Durante un largo paseo en todoterreno por el ecosistema llamado Raña del Parque me sentí como inmersa en uno de esos documentales de safari por el Serengheti, solo que con un sonido y una imagen mucho menos exótica, que no menos interesante ;) Una experiencia para no olvidar.


Sin duda la mejor azaña fue la liberación de tres aves que habían sido rehabilitadas en el Centro de Recuperación de la Fauna El Chaparrillo, gracias al incansable trabajo de sus trabajadoras, que ya se han ganado el cielo. Soltamos un Flamenco Phoenicopterus ruber, un Buho Chico Asio otus y un Mochuelo Athene noctua y ya nos sentimos felices y realizados para todo el día. Los tres eran juveniles, cada uno con un comportamiento totalmente distinto a la hora de la suela. El flamenco fue el primero: como es una acuática que vive en grupos elegimos para la suelta la laguna de Navaseca, donde ya había instalado un generoso grupo de flamencos. Tuvimos que posarlo en una zona de agua somera y para nuestra sorpresa, al tocar tierra, se quedó paralizado, sin alejarse de nosotros, escaneándo la zona con la mirada y empezó a comer. Primera victoria. Al día siguiente pudimos comprobar que estaba perfectamente integrado con los demás, distinguiéndose de los demás pollos tan solo por su nueva joya en la pata izquierda.

El Buho Chico y el Mochuelo fueron otros dos éxitos totalmente distintos. El primero obtuvo su libertad sin pasar apenas por nuestras manos, ya que todos teníamos cierto respeto a la hora de meter la mano en la caja del bicho ese que no para de moverse. Así que simplemente inclinamos la caja y pudimos disfrutar durante escasas décimas de segundo de su vuelo magestuoso y completamente mudo. La suelta del mochuelo la hicieron Cristina y José Luis, por lo que yo no pude verla. Según nos contaron, fue un primor ver como la pequeña rapaz alzaba el vuelo después del pequeño empujón a manos de la voluntaria. Y esta es la historia de que os puedo contar de Camarón, Chapata y Colín (sin preguntas, jaja), que son los protagonistas de mis primeras liberaciones, espero que no las últimas.

Daimiel II: Tablas de carrizo y taray

No considero ésta una noche adecuada para contar algo bonito, mi estado de ánimo no me lo permite, con lo bien que iba el día buscando al Falaropo Picofino en los alrededores de Guadalix de la Sierra....
En fin, que esta noche toca hablar sobre la peor parte del voluntariado ambiental, que es, precisamente, el entorno protagonista. Las Tablas de Daimiel son acualmente ficticias, no existen como tal ya que el acuífero 23 es un colador del que beben grandes cultivos de regadío cebados por pivots y sistemas de goteo. La poca cantidad de agua que permite al Parque Nacional albergar la fauna que presenta es fruto de un bombeo artificial del propio acuífero. Es por esto que el carrizo se ha instalado como dueño y señor de la llanura daimielense y permite, a duras penas, sobrevivir a algunos tarayes que adoptan miles de formas caprichosas. Sobra decir que los ojos del Guadiana ya no lloran, llevan secos más de veinte años, ahora son una inmensa pupila color trigo y tierra rodeada por una zona de turberas en combustión espontánea, además de feas, peligrosas.
Pero da igual, el caso es que "aquí en Daimiel, es que no llueve". Sí señor, precisamente por eso habría que cuidar un poquito más lo que, a pesar de todo, todavía les da vida.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Daimiel I: Preludio

Llegamos el 9 de septiembre al Albergue Juvenil Tablas de Daimiel: muy curioso, bien ambientado y con buenos servicios, personal cuanto menos "rarito" y un nauseabundo olor a cloaca en la ducha común de la habitación Pato Colorado. Un total de 6+1 (voluntarios más monitor) nos encargamos durante las mañanas de 13 días de limpiar alcorques, ayudar a hacer anillamientos a "inventariar" la entomofauna del lugar (mentira, chapuza de taller). Las tardes se dividieron en siesta y turismo, por lo tanto, quizá no se equivoquen al acusar mi voluntariado de estar más cercano a un campamento que a una dura actividad desinteresada. Durante estas tardes pudimos visitar los Parques Arqueológicos de Calatrava La Vieja y Alarcos, el pueblo de Almagro y un centro de recuperación de la fauna llamado "El Chaparrillo", plagado de aves rapaces que aparecen heridas por arma de fuego, electrocutadas o envenenadas para evitar que compitan en el noble arte de la caza... También pudimos disfrutar de la visita a varios espacios protegidos como los Parques Naturales de Las Lagunas de Ruidera y de Alcázar y el Parque Nacional de Cabañeros, donde los ciervos nos obsequiaron con el espectáculo del comienzo de la berrea.
Espero que sirva esta parrafada como introducción a unas interesantísimas entradas bloggeras sobre todos los detalles de mi experiencia voluntario-ambiental. No os perdais las aventuras de una YA LICENCIADA en varios lugares de La Mancha, de cuyos nombres no quiero olvidarme.

domingo, 9 de septiembre de 2007

Llegó el día D (de Daimiel)

Llegó el domingo y con él mi viaje. Mi tren sale a las 13.30 y llegaré a Daimiel dos horas después. Después tendré que encontrar el albergue juvenil (por Dios, que quede cerca) y allí... ¿Y ALLÍ QUÉ? No conozco a nadie! ¿Dormiré sola? ¿Baño común o por habitaciones? Ni siquiera llevo toalla... Bueno, bueno, respiremos, no será nada horrible, una experiencia más.
Con respecto a esto, ya sabeis, hasta el 22 no aparezco.
¡Que paseis buenos días!

jueves, 6 de septiembre de 2007

Día 2

¿Veis? Mi compromiso va viento en popa: segundo día, segunda entrada.
Bueno, la verdad es que no tengo mucho que contar, esta semana está siento de vacaciones sensu stricto y demasiado tranquila para mi gusto, así que, a parte de los nervios, espero con impaciencia que llegue el domingo día 9 para embarcarme (o en-trenarme) rumbo a Las Tablas de Daimiel (Ciudad Real), el Parque Nacional donde realizaré un voluntariado ambiental hasta el día 22 de septiembre. Por ahora no tengo mucha información sobre qué es lo que vamos a hacer los voluntarios allí, a saber: - Taller de anillamiento - Inventarios de entomofauna - Trabajos forestales (que cada uno elucubre y me sugiera). Eso sí, no se me debe olvidar el AUTAN, que pediré amablemente a mi novio (por si lo lees, ya sabes, ejem....)
Me han prometido que me hartaré de ver Colirrojos Reales Phoenicurus phoenicurus, a ver si es verdad y añado una especie a mi humilde lista, aunque no es lo único que espero añadir...
¡Deseadme suerte!

miércoles, 5 de septiembre de 2007

Envidiosa y copiona

Bueno, como al final me he terminado cansando de tantos cambios y gilipolleces del space de hotmail (pronto me cansaré también de la cuenta de correo electrónico) me he autoconvencido de que este blogger es mejor y de la forma más vil y cariñosa he copiado a mi amigo Antón y he comenzado a construir este amago de "cuentario".
Ya que es nuevo, me lo tomo con más ilusión y espero ser un poco más constante las entradas, lo intentaré.
También espero poder contar ahora cosas más interesantes que en el space anterior, ya que soy cuasilicenciada e imagino que se avistarán grandes cambios en mi vida.
Otra esperanza es que éste sea un sitio algo más popular y pueda sorprenderme de vez en cuando con comentarios de todos los que tengan a bien dejarse caer por aquí.
Y ahora, en cuando quede esto colgado me dispondré a entender cómo funciona este trasto para poder hacerlo más ameno y poner enlaces y esas cosas.

Bienvenidos a mi vid@!