No hace falta ni salir de la mayor ciudad de España para disfrutar de zonas verdes, bonitas y llenas de vida. Es una de las cosas que me encantan de esta ciudad.
Pues sin salir de Madrid, en la malrreputacionada (yo también me invento palabras) Casa de Campo hemos podido ver hoy un montón de parajitos y Jorge se ha bimbado una ansiada especie, el piquituerto Loxia curvirostra, el mismo que yo me taché de la lista en la Dehesa de la Villa, otro parque de Madrid, aunque esta vez ha sido una hembra.
Y es que el niño está que no para. Ha aprendido un montón sobre ornitología en tiempo record, a la vez que se ha vuelto más y más friki en el tema, para mi agrado, y aprovechando viajes de visita al extranjero, excursiones largas y cortas con los más entendidos y a fuerza de empeño y curiosidad está recolectando bimbos con una velocidad envidiable. ¡Y que no pare! ;)
El bimbador, exhibiendo dos plumas de urraca que alguna rapaz hambrienta dejó tras de si al pasar por el buffet.
2 comentarios:
Bimbador bimbador, normal que al principio todo vaya már rápido pero seguro que a partir de ahora ya decae el ritmo!! bueno, tamopoco pasa nada :)
Me he reído bastante con lo de major... :-)
Y efectivamente, Jorge, si uno no se mueve mucho es pasmoso lo rápido que se llega a la asíntota...
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